Morena; candidatura común, no coalición
Florentino Peralta
12-20-2021
Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Nueva Alianza, Partido del Trabajo (PT) y Verde Ecologista de México (PVEM) encararán juntos la renovación de gubernatura en Hidalgo y todo apunta que será mediante candidatura común.
A menos que alguno de los involucrados dé un golpe de timón, compartirán la candidatura dentro de la contienda cuya jornada de votaciones está marcada en el calendario electoral para el domingo 5 de junio de 2022 en todo el estado.
¿Por qué candidatura común y no coalición? Porque la primera opción permite una separación administrativa entre los partidos firmantes, así como de propaganda, pues cada uno podría utilizar en solitario su logotipo y recursos financieros.
En consecuencia, los partidos involucrados podrían posicionarse, usar el nombre del a la candidata común y responder en lo individual durante la comprobación del dinero que reciban, sin tener que pagar unos las torpezas de los otros.
¿Cuál es la desventaja de la candidatura común? Que su registro es del 11 de febrero al 4 de marzo de 2022, es decir, cuando pasó ya la etapa de precampaña, por eso existen ya dos recursos para tratar de modificar ese calendario.
Así que, aunque está sobre la mesa que sea candidatura común por las ventajas descritas, solo falta sopesar qué tanto terreno perderían si no existe modificación al calendario y en consecuencia desaprovecharían la precampaña.
En esta canasta Morena aparece como el estelar por la marca que le acuña el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador y su hilarante, por no decir delirante, proceso interno de selección acapara todos los reflectores.
Y ante la polarización electoral que enfrentará esta candidatura común contra la que resulte del Partido Revolucionario Institucional (PRI), con o sin aliados, la figura de Nueva Alianza sería determinante, pues es la cuarta fuerza.
El partido magisterial, cuya fuerza radica en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), pone sobre la mesa un promedio de cinco puntos porcentuales que en caso de cerrarse la votación, habrá de hacer diferencia.
Como antecedente destaca la elección del ya lejano 2010, cuando Nueva Alianza se coaligó con el PRI y su aportación ayudó a derrotar a la alianza contraria que postuló a la hoy senadora del Partido Acción Nacional (PAN), Xóchitl Gálvez.
¿PEQUEÑA DIFERENCIA?
Por enmohecido que parezca el PRI, soberbiamente mal harían sus adversarios en Hidalgo si ignoran que todavía cuenta con operadores políticos probados, que es el partido en el gobierno, que aunque casi, nunca ha perdido la gubernatura y que si sus cuadros efectivamente se unen, y no solamente en una fotografía para tundirse caña después, el tricolor está en condiciones de retener el mandato, así que el proceso que está ya en marcha promete desde ahora una tensa sesión de cómputo y escrutinio donde la aportación magisterial podría marcar la diferencia.
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